La historia de la definición de las tres r
El plástico no se degrada durante nuestra vida. Antes de entrar en las “R” de la reducción de residuos plásticos, vamos a hablar de dos formas alternativas de plástico: el biodegradable y el bioplástico. Los plásticos biodegradables pueden ser descompuestos por organismos vivos, normalmente bacterias; sin embargo, no es lo mismo que compostable; sólo significa “descomponerse”. Para facilitar la descomposición de los plásticos, se añaden sustancias químicas; los plásticos biodegradables tienen más sustancias químicas que los plásticos normales. Los bioplásticos se derivan de la biomasa renovable en lugar de los combustibles fósiles. Aunque este material lleva la palabra bio, no todos los bioplásticos son biodegradables, ni se degradan más fácilmente que el plástico normal. Para eliminar el plástico de nuestro flujo de residuos, debemos seguir estas R:
Paso 5: Recuerde que esta es una propuesta política. Las soluciones no siempre son cambios de política, pero el requisito para este proyecto es que la solución sea un cambio de política o una introducción. Esta sería una buena oportunidad para aclarar este término del vocabulario y enfatizar este requisito del proyecto.
Significado de Rs
Esta regla forma parte de la jerarquía de residuos, que es un proceso utilizado para proteger el medio ambiente y conservar los recursos mediante un enfoque prioritario. El objetivo es obtener los mayores beneficios prácticos de los productos y generar la mínima cantidad de residuos. Este enfoque también provoca otras externalidades positivas como el ahorro de recursos, la reducción de la contaminación y la evitación de emisiones de gases de efecto invernadero, el desarrollo de tecnologías sostenibles y la creación de puestos de trabajo.
Reutilizar significa usar un producto más de una vez, ya sea para el mismo fin (por ejemplo, las botellas de leche de vidrio retornables) o para un fin diferente (como los viejos tarros de mermelada para almacenar alimentos). Reparar productos, venderlos o donarlos a organizaciones benéficas o comunitarias también es reutilizar.
Esto puede suponer convertir el material viejo en una nueva versión del mismo objeto o en algo completamente diferente. Por ejemplo, las botellas de vidrio usadas se pueden reciclar para convertirlas en nuevas botellas o se pueden reciclar como material de carretera para su uso en proyectos de construcción.
Los diferentes tipos de basura se adaptan mejor a diferentes tipos de tratamientos que, a su vez, pueden crear diferentes tipos de energía, desde biogás hasta electricidad. Por ejemplo, los neumáticos viejos pueden sustituir al carbón en el cemento.
3r gestión de residuos
Para mantener la mayor cantidad posible de material fuera del vertedero, es importante que cada uno de nosotros ponga de su parte. Una de las formas de poner en marcha ese plan es a través de las 3 R de la gestión de residuos: reducir, reutilizar y reciclar.
Reducir es simplemente crear menos residuos. Es el mejor método para mantener limpio el medio ambiente, así que es la primera de las 3 R. Al reducir, se detiene el problema en su origen. Si se generan menos residuos, habrá menos residuos que limpiar. Aquí tienes algunas formas sencillas de reducir la cantidad de residuos que produces:
Lleva tu almuerzo en una fiambrera. Las bolsas de papel y plástico generan una gran cantidad de residuos, y las bolsas de plástico tardan cientos de años en descomponerse. Prueba a utilizar una fiambrera resistente o una bolsa de almuerzo reutilizable. Lo mismo ocurre con el contenido de la fiambrera. En lugar de bolsas de plástico, utiliza recipientes reutilizables.
Lleva bolsas reutilizables al supermercado. La mayoría de las tiendas venden bolsas de lona o de plástico resistente que pueden utilizarse una y otra vez. Algunas tiendas de comestibles incluso te descuentan un poco de dinero en la caja si traes tus propias bolsas.
Significado de 3 rs en educación
Las 3 R del medio ambiente -reducir, reutilizar y reciclar- existen desde hace tiempo, pero mucha gente se ha vuelto negligente a la hora de seguirlas. Tal vez el Consejo de Publicidad de Guerra lo dijo mejor en 1944 al promover la conservación del gas, el caucho, la seda y otros recursos escasos.
Cada año, los estadounidenses tiran 50.000 millones de latas de comida y bebida, 27.000 millones de botellas y tarros de vidrio y 65 millones de tapas de tarros y latas de plástico y metal. Más del 30% de nuestros residuos son materiales de embalaje. ¿Adónde va a parar todo esto? Alrededor del 85% de nuestra basura se envía a un vertedero, aunque nos estamos quedando rápidamente sin espacio.
Las empresas de productos de consumo siempre nos están vendiendo una nueva factura. Algunos creen que podemos comprar para conseguir un planeta más sano y feliz. A lo largo de los años, los anunciantes nos han dicho que los coches chulos nos harían libres y que los refrescos dietéticos nos harían populares. Pero hay cosas que el dinero -y la publicidad- no pueden comprar, y un medio ambiente limpio es una de ellas. Lo cierto es que el calentamiento global, la deforestación y otros males de la Tierra no pueden resolverse cambiando de marca.